El viernes pasado tuve una experiencia inolvidable asistiendo a una charla de Benjamin Zander sobre abrirse a las posibilidades del mundo y su filosofía pasaba por alegrarse en un fallo igual que en un éxito y seguir adelante. Un hombre de 70 años, director de orquesta y con una vitalidad tan extraordinaria que en una misma sesión de media hora nos hizo reir, pensar y hasta llorar con su Preludio nº 4 de Chopin. Más aún con la ejecución de esa música nos hizo comprender su sentido y al tiempo, ver lo importante de tener una visión a más largo plazo y no ir tocando las teclas de la vida, del piano, una a una, sin proyectarse al diseño completo, Aquí os dejo una charla suya en http://www.ted.com/ muy similar a la que disfrutamos en la mejor reunión de directivos a la que yo he asistido. (En el minuto 13 más o menos es cuando lloro). ¡Gracias Juana!
También os dejo uno de mis hallazgos de esta noche revisando Twitter, otro video sobre como la vida es un riesgo y fallar, es algo normal, lo importante es el diseño completo, no un punto determinado. Interesante y fácil de utilizar en una presentación (subtitulado en español). ¡Gracias @davidbs!